Siempre me ha llamado poderosamente la atención el hecho de que millones de personas y en prácticamente todos los países del mundo sigan las líneas del Movimiento Scout.
Han pasado ya 104 años desde que B.P. echó a rodar el movimiento educativo más importante de la historia y a día de hoy siga totalmente vigente en países y culturas tan distintas y dispares como la americana, la palestina, la africana o la oriental.
¿Cuál puede ser el motivo de este éxito?. Obviamente no puede haber un único motivo, sino el compendio de varios. Pero si hay algo que coincide en todos los grupos y asociaciones scouts de todo el mundo es la Ley y la Promesa Scout.
Distintos uniformes, distintas ceremonias, distintas líneas educativas, pero todos llevan por bandera la Ley Scout. Una Ley que marca un estilo, una forma de ver la vida. Hoy en día en la sociedad en la que vivimos, seguir una ley que nos indica: austeridad. Amor a la Naturaleza, servir a los demás, honor, etc. conlleva nadar contracorriente.
Cada día es más complicado ser consecuentes con esta Ley, pero ante esa dificultad se alza como una gran luz nuestra Promesa Scout.
Cuando hacemos nuestra Promesa, y como bien decimos en el momento de pronunciarla, nos comprometemos a hacer “cuanto de nosotros dependa…”por intentar cumplir esa Ley Scout en la que creemos.
Desde ese día abrazamos un estilo de vida bien definido y buscamos que sea el camino a seguir en nuestra vida.
Así de sencillo, así de emocionante y así de atrevido.
Durante nuestro campamento en San Martín de las Ollas, habrá personas que den un paso adelante y formulen su Promesa. Quiero desde estas líneas darles la enhorabuena por haber tomado la decisión de formar parte de la Gran Hermandad Scout y de intentar ver a partir de ese momento la vida con un prisma diferente.
Y sobre todo darles las gracias, pues con su Promesa conseguirán que nuestro Movimiento Scout siga vivo y haya más gente luchando por hacer un mundo mejor.
En mi vida personal la Promesa Scout ha sido como un gran faro. Siempre ha estado ahí, brillando, guiándome y sobre todo en los momentos más difíciles, en los momentos de tempestad.
Quisiera dedicar este pequeño artículo a un gran amigo, que ha vivido muchos años dentro del escultismo y que ha dedicado muchas horas a la formación de los chavales.
Él tiene dudas sobre la Promesa Scout y yo sólo puedo decirle: “Ánimo, tu Promesa hará fortalecer tus ideales y el estilo de vida en el que tú crees.”
¡BUENA CAZA!