¡¡¡Halló!!!! Aquí estamos de nuevo los Rutas, después de un mes realmente cargadito de trabajo, pues teníamos que ganarnos el viaje que hicimos este verano, y solucionar algún problemilla económico que nos ocasiono la compañía aérea. ¡Y nos hemos dado cuenta de que aún no os habíamos contado la tercera y última parte de nuestra aventura por aquella isla lejana! ¡No puede ser…!
Además podéis ver un resumen del Roverway y nuestro viaje, y si seguís las fotos en orden os iremos explicando en los comentarios el día a día de nuestra aventura para que lo podáis vivir en primera mano. Pinchad aquí: Fotos del RW
Aquí viene por fin la interesante crónica de los últimos 6 días:
El día 28, como ya sabéis, termino nuestro Roverway, después de la Ceremonia de Clausura y de unas cuantas fotos del contingente de MSC y de Castilla y León cogimos nuestras mochilonas y nos dirigimos a los autobuses que nos llevaron directamente al colegio MH donde nos quedaríamos las siguientes 3 noches.
Lo primero que hicimos al llegar fue pegarnos una magnifica ducha que nos sentó de maravilla y después de esto, decidimos ir a dar una vuelta a Reykjavik ya que hacia buen tiempo y queríamos aprovechar. Nuestro alojamiento no estaba muy lejos del centro así que fuimos andando. Fuimos recorriendo pequeñas callecitas de la pequeña capital y haciendo fotos con cada parte bonita que veíamos. Esa tarde no nos dio tiempo a ver mucho así que decidimos cenar en un mexicano e irnos de nuevo al colegio.
El día 29 nos despertamos prontito porque habíamos cogido una magnífica excursión a la Blue Lagoon, que es un lago azul natural de aguas termales. Allí nos tomamos unas cervecitas en el bar que hay justo en medio de la laguna y después de ponernos barro blanco en la cara (no penséis mal, rejuvenece la piel!!), nadar un poquito y probar unas pequeñas saunas, la excursión se dirigió a un pueblecillo que se sitúa cerca de la laguna. Era un pueblo pesquero, uno de los más famosos de Islandia, allí nos dieron uno de las mejores comidas (hasta ese momento) que habíamos tenido en todo el tiempo. Un pequeño buffet donde nos saciamos lo suficiente.
Llegamos a las 6, más o menos, a Reykjavik de nuevo y decidimos dar otra vueltecilla por el centro ya que el día anterior no habíamos visto todo, nos dirigimos a toda la parte del puerto e hicimos un camino muy bonito con el mar de fondo =). Esta “noche” nos dio por cenar en un chino, pero es que no encontramos nada local…
El día 30 hicimos como no!!! Otra excursión, por el sur de la isla y para no variar los paisajes fueron alucinantes, muchas cascadas de camino, sobre todo la grandiosas Seljalandsfoss y Skogafoss que os impresionaran en las fotos. Pudimos ver, pisar y sentir la fuerza del glaciar Solheimajokull, que aunque sea solo una muy pequeña porción de los monstruos de hielo que allí existen fue una pasada.
Después llegamos a un pueblecito llamado Vik, donde comimos, con su playa de arena negra, para luego hacer una pequeña parada en otra negra playa, donde tocamos el agua oceánica y que tiene tres rocas grandes al fondo que en su momento fueron tres gigantes Trolls convertidos en piedra. Después de muchas fotos y muchas muchas risas también, volvimos al colegio, pero esta vez cenamos allí tranquilamente, para al próximo día estar más descansados.
El día 31, nos levantamos más descansaditos y nos fuimos en barco a ver ballenas!!! Y unos animalitos muy famosos y majotes que se llaman Frailecillos (también conocidos como Puffins), que son pequeños pajaritos bancos y negros con un pico bastante simpático de colores naranjas. Tuvimos un viaje bastante movidito del cual algunos salieron mareados y algo perjudicados, pero conseguimos ver algunas ballenas y mojarnos otro poco!!!
A la hora de la cena nos entro el hambre, claro está, y decidimos ir a un indio, pero que indio!!! Salimos con la boca ardiendo, literalmente, nos tocaron los platos más picantes!! (y eso que la camarera dijo que era el más suave!). Y por la noche teníamos ganas de saber cómo sería la “noche” islandesa, así que nos fuimos a un par de barecillos. Creo que decidimos que nos gusta mucho más Burgos. =)
Y llegó nuestro último día en Reykjavik, el día 1: el cual decidimos pasarlo haciendo una excursión muy típica para todos los turistas que suelen viajar a Islandia. El circulo dorado, que comprende tres puntos fundamentales del sureste de Islandia: Geyser, Thinvellir y Gullfos.
Geyser es un chorro de agua hirviendo que sale de las mismísimas profundidades de la tierra, y que esta acompañado de otros tantos como el. Thinvellir es el Parlamento donde nosotros pasamos los primeros días de nuestras rutas que ya conocíamos bastante y por último Gulfoss son unas cascadas impresionantes que no son las más grandes de Islandia pero si son las más famosas y visitadas.
Cuando llegamos a Reykjavik fuimos a una playa térmica que había muy cerca de nuestro alojamiento y nos dimos un bañito muy relajado. Luego cenamos en una pizzería y más tarde cogimos un taxi y nos dirigimos al aeropuerto de Keflavik para pasar una larga y fría noche sin apenas dormir.
Al día siguiente, el día 2, amanecimos en el aeropuerto y embarcamos pronto con destino a la capital británica, donde teníamos que pasar el día gracias a la compañía aérea. Cansados pero con mucho humor pasamos el día paseando por Londres entre Notthing Hill, Central Park, Temple, Picadilly Circus, el puente del milenio y algún que otro rincón más de Londres que íbamos descubriendo sobre la marcha, descubrimos de nuevo lo que era la noche y completamente agotados nos fuimos a dormir (poco también) al albergue que conocimos en nuestro viaje al Jamboree 2007.
El último día fue un día muy intenso y muy duro, después de levantarnos a las 5, coger autobús y tren al aeropuerto conseguimos llegar con buen tiempo para embarcar, pero por un problema de la compañía de vuelos no pudimos hacerlo. Así que toco pasarnos de nuevo horas y horas en Gatwick, un lugar que ya casi podemos considerar como nuestra segunda casa. Gustosamente las pasamos haciendo llamada tras llamada a la compañía buscando lo imposible para conseguir vuelo. Al final logramos un vuelo a las 5 de la tarde (pagando claro), y pudimos coger el autobús de las 12 y así llegamos a las 3 de la madrugada a Burgos. Desde donde seguimos realizando las gestiones necesarias para solucionar el problema del último vuelo.
Así terminó nuestro maravilloso viaje, unos días increíbles en el que a parte de vivir una experiencia única hemos aprendido muchísimo del resto de personas con las que hemos convivido allí.
Buena caza y largas lunas.
Y así nos despedimos el Clan Arbayún XXII. (el nombre ya lo tenemos, pero os dejaremos con la duda…)
Bien, por fin la última parte. Impresionantes las fotos, chicos. Me alegro mucho por vosotros. Toda una experiencia, eh?